Lo más importante es asegurarse de contar con una buena defensa, ya que las compañías de seguro cuentan con equipos especializados en este tipo de juicios, lo que no implica darse por perdido, ya que con una buena defensa es posible obtener muy buenos resultados. Por otro lado, el solo hecho de una demanda no significa en absoluto que las pretensiones de la compañía de seguro sean válidas. Por el contrario, existe la posibilidad de demandar reconvencionalmente, y no pocas veces se logra obtener indemnización de parte de las aseguradora. Mucho cuidado, que los plazos son muy breves.